Una terraza es un espacio fantástico para transmitir a los niños la afición por la jardinería.
Al diseñar una terraza para el disfrute de los más pequeños de la casa revisaremos todos los aspectos de seguridad para evitar accidentes:
- Las barandillas deben ser altas y seguras, con travesaños juntos y horizontales.
- Evitaremos las plantas tóxicas como adelfa, tejo, rododendros… Consulta si una planta es tóxica a través de nuestra Guía de plantas.
- No usaremos fertilizantes ni pesticidas químicos.
- Pondremos un suelo firme y no resbaladizo.
Garantizada la máxima seguridad, nos podemos centrar en que la terraza resulte divertida y cautivadora para los más pequeños de la casa.
- Elegiremos plantas que cambien en las distintas estaciones del año.
- Incluiremos plantas que florezcan en distintos colores.
- Los niños disfrutarán observando cómo crecen las plantas anuales, aprendiendo a plantarlas, regándolas…
- Cultivando hortalizas y pequeños frutales podrán descubrir de dónde salen las frutas y las verduras, lo que además les enseñará a comer más sano.
- ¿Y qué tal si incorporamos algún elemento acuático? Una fuente, un mini estanque con peces… A los niños les encanta jugar con el agua.
Por último, transmitamos a nuestros hijos el amor y sensibilidad por todos los seres vivos que forman parte del jardín, las plantas, las abejas, las mariquitas, las mariposas y hasta los gusanitos que verán salir de la tierra en alguna ocasión.
El contacto con la naturaleza les hará personas más felices y más fuertes.